Una sonrisa perfecta depende de principalmente dos elementos: la disposición de los dientes, es decir, que no estén separados ni montados los unos sobre los otros, y su color. A todos nos parecen más estéticos los dientes blancos, y por eso Rubén Darío utilizaba las perlas y no los limones en sus metáforas. El amarillo no es un color sugerente para la vista ni para la lírica. Pero, ¿por qué pueden originarse los dientes amarillos y qué podemos hacer para evitarlos?

Causas de los dientes amarillos

Para ganarnos la inspiración de los aficionados al verso y la simpatía de los ojos curiosos, resulta de ayuda conocer el origen del problema antes de ponerle solución. Los dientes amarillos pueden deberse a distintas causas, todas ellas englobadas en dos categorías fundamentales.

Problemas de salud

Hay algunas patologías congénitas que pueden dar como resultado unos dientes de pigmentación incómoda. Las más comunes son la dentinogénesis y la amelogénesis imperfecta. Ambos problemas de salud generan imperfecciones en el esmalte o en la dentina. El resultado es que el blancor natural se ve sustituido por un tono amarillento. En los peores casos, éste puede ser incluso marrón.

Malos hábitos

Lo más frecuente, sin embargo, es que las coloraciones indeseadas se deban a circunstancias que están bajo nuestro control. El consumo excesivo de algunas bebidas, en especial el café y el té verde, pueden alterar la pigmentación dental. Lo mejor es no abusar de estas infusiones, y llevar una higiene rigurosa para paliar, en la medida de lo posible, sus efectos.

¿Son las únicas bebidas que debemos evitar? No. Aunque te sorprenda, el agua que tomes también influirá en tu aspecto. Algunas marcas contienen cantidades imprudentes de flúor. Cuando este elemento se encuentra en exceso en la composición de nuestras agua, hablaremos de fluorosis. ¿Adivinas sus efectos? Has acertado: se trata de una condición que genera manchas en los dientes.

El tabaquismo es otra de las razones principales para el amarillo dental. Fumar es malo para la salud en todas sus vertientes. No sólo es cancerígeno y dañino, en general, para nuestras vías respiratorias y nuestro corazón, sino que también puede afectar a la piel o, en el caso que nos ocupa, al lucimiento de una sonrisa agradable.

Otro de los hábitos que incide sobre esta circunstancia es el consumo de medicamentos. En este caso, hay menos posibilidades de ajustar su control, ya que algunas enfermedades requieren de medicación sí o sí.

Solución para los dientes amarillos

Conviene desconfiar de los remedios caseros para retornar el vigor a nuestros dientes. Muchos de ellos pueden ser incluso perjudiciales si no se administran bajo las pautas de una correcta supervisión médica. ¿Quieres acabar como Ross, el personaje de Friends que se veía obligado a tener una cita con la boca cerrada para no asustar a su pareja? Además, este tipo de recetas mágicas están muchas veces concebidas para engañar al cliente. Los dentífricos blanqueadores crean en ocasiones la ilusión visual de una regeneración que no se sostiene en el tiempo.

Los mejores remedios para este problema los encontrarás, como siempre, en una clínica profesional. El blanqueamiento dental es el método estándar para dejar atrás los dientes amarillos y lucir de nuevo una sonrisa magnética. En Clínicas DEA te ofrecemos éste y otros servicios. ¡Contáctanos!